Solución para una piel sana. La COSMECÉUTICA

¿Qué es la cosmeceútica?

El término surge en los años 80 acuñado por el Dr. Albert Klingman. Se trata del fruto de la unión de las palabras «Cosmética» y «Farmaceútica»; así el término «Cosmecéutica» , el cual hace referencia a productos cosméticos de gran eficacia caracterizados por basarse en ingredientes activos de eficacia química probada, formulados a altas dosis. Pueden ser denominados también como Dermacéuticos.

La cosmecéutica consigue una acción cosmética más activa y su auge obedece a una tendencia a buscar alternativas menos invasivas que los tratamientos médicos a fin de conseguir una mayor belleza: tratamientos antiedad, despigmentantes o blanqueadores cutáneos muy efectivos sin pasar por las hidroquinonas o los tratamientos por láser, anticelulíticos específicos, lucha contra la flacidez y efectos tensores efectivos.

Además son muy recomendables antes y después de tratamientos de cirugia estética y no deben confundirse con los nutricosméticos, que son suplementos/alimentos con efectos sobre la piel.

¿Cómo se utiliza la cosmecéutica?

Los cosmecéuticos son productos cosméticos y como tales se utilizan de forma tópica (cremas, lociones, serums,etc) sobre pieles sanas y con la finalidad para las cuales fueron formulados siguiendo siempre las instrucciones del fabricante. Gracias a su formulación pueden llegar hasta la capa basal de la piel donde liberan el principio activo modificando y reparando la estructura celular, retrasando de esta manera el envejecimiento.

Cosmecéutica – Principios activos

Una de las premisas para considerar a un cosmecéutico a un producto cosmético es que todos los principios activos deben estar respaldados por la ciencia con resultados repetibles para conseguir el fin con el que se utilizan y ser aplicados en una piel sana mejorando su apariencia.

Algunos ejemplos son los ácidos: